Fue tan rápida la llegada de agua con las avenidas que no nos dio tiempo de protegernos

Oct 20, 2021

Por Argimiro León

Debido a que cuando inició el desbordamiento de ríos se pensó que la afectación podía ser igual o menor que la de hace tres años, no hubo tiempo para salvar mucho ganado, ya que alrededor de 500 o 600 cabezas entre caballos, burros y reses, se perdieron en los municipios de la zona norte del estado debido a las inundaciones que dejó el huracán Pamela y esperamos que no llegue nuevamente otro huracán que se está anunciando por la misma trayectoria, así lo señaló el presidente de la CNC en Nayarit, Carlos Castillón Medina.

Señaló que la mayor parte de los liderazgos de las organizaciones, de los ejidatarios y comuneros de las zonas que en estos momentos se encuentran afectadas, le han comentado que debe exigir la Construcción de la Presa de Las Cruces, pero además que en el río Acaponeta, en la región de Cucharas, también se construya otra presa, para evitar los problemas que cada temporada de luvias sufren los habitantes de la zona norte del estado.

Para ello, dijo el líder campesino en la entidad, “me piden que solicite al gobierno del estado que para el presupuesto del 2022 y en el Plan Estatal de Desarrollo del próximo año, se destine un presupuesto y se busque la forma de conseguir los recursos necesarios para estas obras”, porque solo así podrán dormir tranquilos cada año, porque se han construido bordos para proteger  los habitantes de algunas comunidades o cabeceras municipales, pero eso no es suficiente porque en ocasiones se convierten en trampas, ya que al inundarse las zonas se convierten en lagos gigantes, no permiten que la gente salga y se muere o se destruyen las obras construidas.

Astillón Medina comentó que hay quienes dicen que las pesas son perjudiciales para el cambio climático, ya que los ríos regulan el agua de los mares y evitan que la salinidad llegue al interior de los pueblos, pero esos son daños menores cuando hablamos de pérdida del patrimonio de la gente, así como de vidas humanas y eso “lo hemos vivido por muchos años en la zona norte del estado, principalmente, sin que a la fecha se tena un proyecto viable para eliminar esos problemas cuando llega la temporada de huracanes tropicales”.

Más adelante hizo mención que ya es ora de que se tomen medidas drásticas para detener las avenidas que cada día vienen más fuertes, como sucedió en esta ocasión, que hubo menores daños con el paso del huracán Willa y con el huracán Pamela, la destrucción fue mayor, ya que el agua se amplió, aunque no hubo mucho loco como hace tres años.

Finalmente comentó Carlos Castillón, que desde los tiempos de Don Porfirio Diaz, está planeado el Plan Hídrico del Occidente, que es la detención del agua de esos ríos en presas y utilizarla para el riego “lo cual nos ayudará y nos beneficiará, tanto a los campesinos y productores, como al comercio y a toda la población en general”.